Septiembre,
New York (Estados Unidos) 2017
Antes
de seguir en el presente os tengo que contar qué acontecimientos me llevaron a
estar en esta situación. ¡Qué modales los míos!, me presento, me llamo Alex, de
Alexandra, y tengo 24 años recién cumplidos, soy pelirroja y mis ojos son
castaños oscuros, los heredé de mi padre, de mi madre heredé el busto. No tengo
pareja puesto que después de tantos intentos fallidos he decidido darme un
tiempo para conocerme y así centrarme más en mi trabajo: soy psicóloga, trabajo
desde mi piso en New York, no me va mal aunque últimamente tengo menos
clientes. Bueno, volveremos a centrarnos en la historia que remonta hace seis
años, en Madrid (España), allí nací y me crié pero nunca vi mi futuro en ese
país.
Julio,
Madrid (España) 2011
Hemos
quedado todos para celebrar que hemos aprobado Selectividad, vamos a hacer un
picnic.
-¡Madre
mía, aún no me creo que hayamos aprobado, y con notable! –Niki siempre ha sido
muy sincera, pero al fin y al cabo es mi mejor amiga desde que éramos unos piojos
de 5 años. Es rubia, alta, con los ojos azules como el mar, siempre se quedaba
con los chicos guapos en la discoteca pero conoció a Pablo y acabó sus días de
ligona, pero estoy muy contenta por ella, yo sé que Pablo le hace muy feliz.
También tengo que decir que habla un poco como las pijas pero su serie favorita
influye mucho en las chicas de hoy en día.
-
Lo sé, ¿ya has decidido a qué universidad vas a ir?
- No, pero seguro que voy a la complutense.
¿Has recibido ya alguna respuesta de tus solicitudes?
-
¡Sí! La de Nueva York me ha concedido una beca por 4 años para estudiar
cualquier carrera, así que en agosto me voy. –Mi sueño hecho realidad. Me da
pena dejar a mis amigos, sobre todo a Yosh, pero ese asunto no va a ninguna
parte y tengo que seguir mi vida.
-Jo
tía, te voy a echar de menos, y dime ¿te ha pedido ya salir Yosh? –Yosh es mi
mejor amigo, guapo, con el pelo castaño claro. Me encanta cuando le da el sol:
se le ven reflejos rubios. En mi vida había visto unos ojos tan bonitos. Son
castaños pero con tonos grises, y además tiene una mirada tan profunda que
enamora a cualquiera. Es mi vecino y además nuestros padres fueron juntos a la universidad;
qué puedo decir de él, estoy enamorada pero él no siente nada y se podría decir
que yo ya he desistido de cualquier opción de salir con él, así que me voy a
estudiar psicología a los Estados Unidos. Le voy a echar de menos pero prefiero
llevarme los recuerdos que tengo con él. Aun así, en mi corazón siempre habrá
sitio para él.
-Niki,
sabes perfectamente que no siente nada, además él va a estudiar en la europea y
yo me voy de España, sería totalmente imposible. De todas formas prefiero que
sigamos así, amigos, además es mejor haber amado y perdido que no haber amado
nunca.
-¡Oh,
qué tierno! –nos reímos-. Bueno hablando de chicos, Pablo va a venir conmigo a
la complutense, nos vamos a buscar un pisito en el centro. Y ¿tú ya has encontrado
algo allí?
-
No me hace falta, la universidad nos ofrece un piso a los estudiantes, lo
comparto con otras 2 chicas. –Yosh y Pablo se acercan.
-Hola
chicas, hola tesoro. Ya tengo piso, 1 habitación, baño completo, cocina no muy
grande, perfecto. –En los ojos de Pablo puedo notar un ligero brillo. Es un
chico muy guapo, pelo castaño, ojos de color miel, pero aun así no es mi tipo,
pega más con Niki. En aquel momento veo cuánto la quiere. Ojala yo encuentre un
chico que me ame así.
-Me
encanta, bueno de todas formas mañana nos pasamos a verlo –quién les iba a decir
que al terminar la universidad cambiarían ese pisito por una casa de cuatro
habitaciones con jardín y piscina a las afueras de la ciudad.
-
¿Te han aceptado en alguna universidad Alex?
-Sí,
me voy a Nueva York en agosto, os voy a echar de menos chicos. Pero bueno ya
sabíamos que esto iba a pasar tarde o temprano –Niki le guiña un ojo a Pablo.
-
Bueno, nosotros nos vamos, ya te llamaré Alex y nos despedimos, bye –Niki y
Pablo se alejan.
-
Entonces a la gran manzana ¿no? –Yosh estaba nervio-so. Sigo sin saber el por
qué.
-
Sí, parece mentira.
-
Sobretodo porque no vas a cumplir nuestra promesa.
-
Yosh, no me hagas chantaje emocional, cuando crecimos un poco nos dimos cuenta
de que la promesa de quedarnos juntos para siempre era totalmente imposible,
pero no voy a romper la promesa de ser amigos para siempre, a la distancia,
pero seremos amigos, además cuando terminemos de estudiar nos podemos volver a
ver para contarnos cosas, ya me dirás cuántas chicas te han dado calabazas.
Bueno, empecemos a comer puesto que Estos no tienen pinta de volver.
Agosto,
Madrid (España) 2011
Aeropuerto
de Barajas, estoy a punto de partir.
-
Llámame cuando llegues cariño.
-
Yo también te voy a echar de menos mamá.
-
Cuídate cariño, por favor, y ya sabes estudia, estudia, estudia. –¡Madres! Sólo
ellas saben decirte lo que tienes qué hacer. Les voy a echar tanto de menos.
Pero algún día tenía que volar del nido. Esperaba que fuera más tarde. Bueno,
al menos esta experiencia me va a servir para madurar, que buena falta me hace.
-
Adiós Alex, no te busques una nueva
mejor amiga ¿eh?
-
Adiós, y no te preocupes que además allí la gente no está tan loca como tú, con
lo cual no te puedo reemplazar. Cuídate Niki, ¿me lo prometes?
-
Claro que sí, y ya sabes, busca a un chico que no hable mucho que los estadounidenses
hablan como locos. –Yosh se acerca y me coge de las manos.
-
No te olvides de nuestra promesa.
-
Tranquilo, nos vemos al acabar ¿no? –Ya he pasado el control y me giro para
verlos por última vez. Al verle me da pena no haberle dicho nada, y sobretodo
me voy con ganas de besarle. Es lo único de lo que me arrepiento en mi vida.
Septiembre,
New York (Estados Unidos) 2017
No
nos hemos vuelto a ver. No es que no haya tenido pre-tendientes, porque novios
ha habido, pero ellos no eran the one.
Ahora estoy en mi pisito de soltera: un ático dúplex, con un montón de muebles
modernos que mi sueldo de 70 dólares la hora me ha sabido ofrecer. Bueno, os
dejo que ha venido el cliente más guapo de los que tengo.
-
¿Qué tal estás Bobby? ¿Sigues sin poder dormir o ya concilias el sueño?
No hay comentarios:
Publicar un comentario